lunes, 17 de agosto de 2009

Noches de verano!!!!!!!!

Enciendo mi último cigarro
tres noches sin dormir y comiendo lo infimamente necesario me han llamado a olvidarte.
La terraza de mi pequeño apartamento , ahora mi lugar de descanso, cada vez se hace mas y mas grande , conforme voy vaciando de mi memoria todos los recuerdos...
Apoyada en la balaustrada me asaltan mil preguntas sobre el universo, sobre lo humano y lo divino ,
querer , vivir morir , morir por amor;mientras , reparo en cada una de las estrellas de un cielo oscuro , que por uno de los extremos que mi vista alcanza a ver pqueños destellos de luz me miran , me observan y me incitan a acabar con esta agonía , a saltar y romper las reglas escritas sobre la vida y sobre amar.........
¿Y si solo es mi cabeza la que da vueltas mientras la suya duerme placidamente , arropada en sus debilidades y fantasias , abrazada a una almohada que...hacía las veces de única confesora?
La luna me llamaba a gritos , mi fiel confesora mi amante prohibida , la dueña de mis sueños.....
me decía que rompiera con todo , que volara hacia ella y que no volviera nunca.
La poca luz que había en la terraza cada vez se iba apagando mas rapidamente , me envolvía una completa oscuridad y por unos instantes me senti libre
libre de que nadie reparara en mi en ese momento
libre por ser una mota de polvo mas en un universo infinito
libre de no ser querida...
Por unos instantes abrazé la soledad , la oscuridad, la luna , las estrellas, y el viento que airaba mi pelo.
Desperté de mi ensoñamiento y vi la sombra de una pequeña montaña que se alzaba sobre la incansable ciudad.Deseé ser fuerte como ella, grande y fuerte ; y no sabes que un simple susurro en mi odio , su susurro podía romper todo mi castillo de naipesy aunque volviera a construirlo , de nuevo volvería a susurrarme y volvería a caer , arrastrada por el oleaje.
Me estremecería , me daría la vuelta y la besaría , apasionadamente sin preocuparme el después.
Rogé a la luna durante horas y horas por quedarme ahí inmovil para siempre , ser fuerte como montaña y fría como el viento de poniente....no me di cuenta que entre discurso y discurso el humo del cigarro había llegado a la boquilla y esta se había quemado.
Esa noche soñé contigo: tus abrazos , tus susurros, tus labios, que me rozaras con dulzura y me besaras , jugaras con mi pelo y tu respiración entrecortada,
hasta podía sentir tu corazón palpitando jadeante,
A la mañana siguiente al despertar hize mi maleta y me fui donde me llamaba el cielo -...
para no volver jamás!

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